lunes, 6 de febrero de 2017

Port Vila

La última etapa de nuestro viaje por la Melanesia, contemplaba visitar Vanuatu. Un país bastante desconocido, aunque para los españoles no debería serlo tanto, pues fuimos los primeros en llegar. En melanesio, Vanuatu significa "nuestra tierra", y esta república independiente desde 1980, está formada por un archipiélago, situado entre Nueva Caledonia y Fiji, con 83 islas idílicas de origen volcánico, de las cuales sólo un tercio están habitadas, siendo su población total de apenas 200.000 habitantes.
El archipiélago fue descubierto en 1606, por una expedición española comandada por Pedro Fernández de Quirós. Tras zarpar del puerto del Callao (Lima) y 
después de cinco meses, desembarcó en una isla que creyó era parte del gran continente del sur (Terra Australis), y la llamó la "Austrialia del Espíritu Santo" (mezclando las palabras Austral y Austria, dinastía reinante en España). Quirós tomó posesión de las islas en nombre del Rey de España y fundó una colonia, Nueva Jerusalén, pero 49 días después, sus hombres las abandonan y regresan al Perú. Muchos autores asignan a Quirós, la invención del término "Australia".

En la década de 1880, Francia y Gran Bretaña reclamaron regiones del archipiélago, y decidieron administrar de manera conjunta a través de un Condominio, el territorio denominado como las "Nuevas Hébridas", en referencia al archipiélago escocés, término que prevaleció hasta su independencia. Fue una experiencia singular que llevó a crear dos policías, dos hospitales, dos escuelas, dos idiomas... Por eso el Condominio fue más conocido como el "Pandemonio".
Para dirimir las disputas entre Francia y Gran Bretaña, se constituyó el Tribunal Internacional Mixto de las Nuevas Hébridas, recayendo a España su Presidencia, en recuerdo a Quirós. Alfonso XIII nombró al Conde de Buena Esperanza como primer Presidente, y el último fue el barcelonés Manuel Bosch i Barret (1936-1939).


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Port Vila, es la pequeña capital de Vanuatu con sólo 40.000 habitantes y está ubicada en la isla de Éfaté, entre los atolones septentrional y meridional del archipiélago. La ciudad está asentada entre dos bahías, la de Vila al oeste y la de Erakor al este. Enfrente, la isla de Iririki, donde antiguamente residía el Gobernador, hoy sede de un resort de lujo.
El Noordam navega lentamente por la bahía Mele, para proseguir hacia la bahía Vila y nosotros desde la cubierta superior, contemplamos la belleza espectacular de este paraíso del Sur del Pacifico. Finalmente el barco atraca en un muelle comercial, situado a 5 km al suroeste del centro de la ciudad de Port Vila. A la salida del muelle y tras arduas negociaciones, tomamos un taxi para realizar un tour de jornada completa por la isla. Eramos seis personas y la furgoneta estaba destartalada y sin aire acondicionado, y además el conductor dominaba muy poco el inglés y nosotros tampoco eramos expertos en bislama. Empieza la aventura !!!

El primer objetivo de la excursión era visitar la "Laguna Azul" de Eton. En cuanto salimos de los alrededores de la capital, de inmediato nos dimos cuenta de la naturaleza exuberante que brinda el interior de la isla de Éfaté, con sus frondosas e impenetrables selvas. El habitat sorprende, si además tenemos en cuenta la diversidad de especies de flora: más de 150 de orquídeas y 250 de helechos.
Llegamos a la Laguna Azul y ante nuestros ojos se abre una explosión de color, que nos deja tremendamente impresionados y que oscila entre el intenso azul turquesa de las aguas y las diversas tonalidades de verde de la vegetación y de los manglares que rodean a la laguna.
Un lugar con mucho encanto, donde la entrada de agua del Océano Pacífico confluye con las aguas transparentes y turquesas de una profunda poza, todo ello enmarcado en un entorno de naturaleza salvaje de jungla tropical.
En este enclave paradisiaco que invita a la acción, unos se bañan, otros practican snorkel y otros hacen de Tarzán saltando con las cuerdas de nudos.

Al final de un estrecho sendero que bordea la laguna, alcanzamos la visión del mar. Y aquí, justo en este recóndito y oculto lugar de nuestro planeta, los jóvenes que están saltando desde las rocas del acantilado, nos avisan a gritos de que mañana se juega el Gran Clásico de fútbol: Barça - Real Madrid y que se puede sintonizar por un determinado canal de televisión. Ináudito !!! Es increíble hasta donde llega la influencia de los fenómenos futbolísticos !!! Nosotros preferimos prestar más atención a la espectacular naturaleza que nos rodea.

Una muestra de las increíbles formaciones coralinas, que llegan a alcanzar tamaños de grandes acantilados.

Subimos de nuevo a la furgoneta y nos dirigimos hacia un centro de recuperación de tortugas marinas. Por el recorrido, comprobamos de nuevo que esta isla, ofrece una naturaleza virgen casi intacta, donde el impacto del hombre es todavía muy liviano o superficial. Hermosa flora, playas infinitas desiertas, ausencia de establecimientos turísticos ....

Justo en la desembocadura de un río, se encontraba el centro de recuperación de tortugas marinas. Habían construido varias cabañas tradicionales y en su alrededor colocado los típicos "tikis", estatuas de madera de gran tamaño con forma humana. Debido al horario y la imposibilidad de pagar con tarjeta de crédito, decidimos seguir con nuestro tour.

Después de la experiencia de los últimos días practicando snorkel, queríamos de nuevo repetir, en esta ocasión en un lugar muy recomendado: la isla Hideaway. Es una isla muy accesible, que se encuentra sólo a cinco minutos de la costa y te llevan en un pequeño transbordador. Como curiosidad, puedes enviar una postal a prueba de agua, desde la oficina de correos que tienen bajo el agua.

Sin embargo, el tiempo no acompañó y las condiciones del mar no eran adecuadas para el snorkel, así que después de un tiempo para el relax y las compras de recuerdos, regresamos de nuevo a la ciudad de Port Vila.
La capital de Vanuatu, se reduce a poco más de una larga calle, la Kumul, su vía comercial y principal arteria, que bordea la hermosa bahía y la población se encuentra muy dispersa entre las numerosas edificaciones que salpican las laderas de las colinas o en las orillas de las bahías, alrededor del entorno natural en donde se encuentra ubicada la ciudad.
Nuestra última parada sería el mercado central de frutas y verduras, en la misma calle Kumul. Una construcción con estructura de hormigón y cobertura del techo, que alberga los puestos de venta de toda clase de productos frescos locales. La oferta es impresionante y nos encanta el colorido y la diversidad de tan exóticos productos. Está bastante concurrido por lugareños que realizan sus compras y nos llama la atención la dificultad de caminar por los pasillos, pues llegan a exponer sus productos en medio de los mismos. Espectacular la diversidad de tubérculos y hortalizas que exponían !!
Para saciar parte de nuestra ignorancia sobre las frutas, nos dirigíamos a los vendedores y siempre nos atendían con una amable sonrisa. Y eso, sin dominar el bislama, idioma criollo oficial que al parecer tiene su origen en los esclavos que fueron llevados a Australia para trabajar en la caña de azúcar. Es una especie de mezcla de léxico inglés (90%), algún término de francés y el resto de lenguas aborígenes. Por ejemplo
: "nambawan" es "number one" . . .
Vanuatu, con sus 115 lenguas, cada una con sus dialectos y tres idiomas oficiales (inglés, francés y bislama), tiene la mayor concentración de lenguas diferentes per cápita del mundo.

Después de observar como la población de Vanuatu les encanta la fruta y la verdura, nos viene a la memoria el hecho de que en estas islas se practicaba extensamente el canibalismo más cruel. Oficialmente desapareció a finales de la década de los años sesenta, debido a que los misioneros cristianos consiguieron inculcar a las tribus locales, que no era un rito deseable. Se considera que en la isla de Malekula, las tribus de los "big y small nambas (taparrabos)", devoraron a su última víctima en 1974. Aunque es imposible certificar que la prohibición actual se cumpla al 100%, hoy en día los vanuateños se regalan tradicionales pollos en lugar de extremidades humanas (brazos y piernas).
Abandonamos la furgoneta y nos disponemos a embarcar, pero antes una joven banda musical nos ofrece una cálida despedida.

Ya embarcados y mientras salimos de la hermosa bahía Mele, recordamos que tanto Lonely Planet (2006 y 2010) como la New Economics Foundation (2006), han declarado a Vanuatu como el país más feliz del mundo. El Índice de Planeta Feliz divulgado por la fundación inglesa, olvida casi por completo el PIB del país y se centra más en factores de supervivencia y de armonía con la naturaleza. Así la fórmula mágica de esa felicidad sería: Bienestar (cultura, gastronomía, etc.) por Esperanza de Vida dividido por Impacto Ecológico. Sin embargo en los rankings de desarrollo humano de la ONU no aparece Vanuatu en los primeros puestos.
Quizás el desarrollo o progreso humano no conduce a la felicidad ??

Al parecer, no siempre la prosperidad acarrea una mayor dosis de felicidad, ya que cuando las necesidades básicas están cubiertas, no es el dinero el factor de aumento de bienestar, sino otros factores menos evidentes. La revista Science, ha publicado estudios de cómo multiplicar los sueldos o ganar premios de lotería, no ha repercutido a medio o largo plazo con un mayor índice de felicidad. El camino de la búsqueda de la felicidad, es el que nos aporta ciertas dosis de satisfacción, pero de inmediato necesitamos nuevos retos para conseguir el mismo efecto. Un proceso dinámico y cambiante en el tiempo.
Desde luego Vanuatu, reune parámetros muy positivos al observar como sus habitantes afrontan la vida y el impacto que dejan en el medio ambiente. El hambre no existe, su esperanza de vida es de 72 años, la educación les impide el mal humor, viven sin estrés y sin prisas, sus ocupaciones laborales no alimentan la acumulación de bienes materiales y por si fuera poco este estado de relajación y de paz, por las tardes tienen su cita con la kava (con fuerte poder ansiolítico) que les proporciona un regreso al tiempo de sus antepasados, todavía mucho más feliz que el actual.
Y el impacto medioambiental que dejan los nativos vanuateños se puede contemplar directamente en sus numerosas playas desiertas, bosques inmensos de palmeras, espesas selvas exentas de peligrosos depredadores y reptiles. Aunque también es cierto que la ONU considera a Vanuatu, como el país del mundo con más probabilidad de desastres naturales que pueden conducir a su desaparición, sobre todo debido al calentamiento global y al consiguiente aumento del nivel del mar.

Dejamos Vanuatu, sin contemplar 
sus numerosas peculiaridades culturales de indudable exotismo, así como el mundo mágico y misterioso de sus ritualesPero para ello, precisamos disponer de mucho más tiempo de estancia.
Entre sus rituales, destacaríamos los ancestrales ritos de la fertilidad de la isla de Pentecostés, que se celebran en abril y mayo, cuando llega la cosecha del ñame y que inspiraron internacionalmente el bungee jumping o puenting. Los "hombres pájaro" practican el nangol, lanzándose de cabeza al vacio desde torres de madera de hasta 30 m de altura, atados sólo a los tobillos con unas largas lianas. Al rozar el suelo con la cabeza, se supone que la cosecha del próximo año será mucho más fructífera. Un ritual de riesgo, que en la última exhibición ante la reina Isabel de Inglaterra, dejó una víctima mortal entre los nativos participantes.
Vanuatu, un paraíso que nos ha cautivado por su belleza, la calidez de sus gentes y sus ancestrales tradiciones tribales.

1 comentario:

  1. Felicidades por haber vivido esa experiencia!! En mi retina imaginaria la guardaré.

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